Estados Unidos vive una nueva jornada violenta con un tiroteo en la Universidad Estatal de Florida. Dos personas murieron y otras cinco resultaron heridas, de las cuales una se encuentra en estado crítico, según informó la Policía de Tallahasse.
El tirador ya fue detenido e identificado: se trata de Phoenix Ikner, un joven de 20 años, hijo de una agente del condado. Así es como tuvo acceso a las armas de su madre, quien se manifestó muy sorprendida por lo sucedido.
Según indicó, su hijo pertenecía al Consejo Asesor Juvenil de la Oficina del Sheriff, lo que de algún modo lo vinculaba con la institución a la que atacó.
El sheriff del condado de Leon, Walt McNeil, dijo que el objetivo es enviar un mensaje contundente: “Haremos todo lo posible para enjuiciar y asegurarnos de que esto nunca se tolere en el condado de Leon, y me atrevería a decir, en todo este estado y en toda esta nación”.
En palabras del propio McNeil, “este hecho es trágico en más formas de las que ustedes en la audiencia podrían imaginar desde la perspectiva de las fuerzas del orden”.
Mientras que, desde la Universidad, el jefe de policía, Jason Trumbower, señaló que el presunto tirador también está recibiendo atención médica en un hospital local, al igual que otras cinco personas que fueron trasladadas tras el tiroteo.
