
Con las bajas temperaturas, las personas buscan resguardarse del frío utilizando diferentes métodos: caloventores, calefacción de tiro, a gas, braseros, estufas, entre otros. Sin embargo, hay quienes desconocen los cuidados que se requieren a la hora de utilizar estos artefactos.
Este domingo se registró una segunda persona descompensada por haber inhalado monóxido de carbono, el conocido como “asesino silencioso”. El primer caso fue en Nueva Francia, y cerca del mediodía de este 1 de junio otro hombre sufrió las consecuencias de este gas nocivo.
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El hecho se produjo en el barrio Maco Solar del Sur donde un hombre logró pedir ayuda a su vecino antes de descompensarse. Se acercó hasta su domicilio y le dijo que tanto él como su amigo estaban mal de salud, por lo que requerían asistencia médica.
La persona que los auxilió, de apellido Rojas llamó a la ambulancia. Reconoció que no conocía a las víctimas, pero le contaron que habían estado calentando el hogar que alquilan y se intoxicaron. Ambos se encuentran bien de salud.