En Boca no ven bien a Russo y su continuidad es una incógnita

Puertas adentro, después de la derrota ante Huracán y haber llegado a la peor racha de la historia sin ganar (11 partidos), en Boca hay demasiada preocupación.

Por dos motivos: lo futbolístico, porque el equipo no genera confianza, no muestra una mejoría en el rendimiento y los niveles individuales son muy bajos. Y la salud del DT, Miguel Ángel Russo.

La imagen del entrenador preocupa, inquieta al entorno sobre todo después de ver sus gestos en el partido y post encuentro ante Huracán. El escalón para subir a la conferencia de prensa a Miguel le costó mucho, necesitó de ayuda para estabilizarse y llegar a la silla.

Al margen de esa imagen, la dirigencia comandada por Juan Román Riquelme analiza la posibilidad de un rotundo cambio, más allá que el Director Técnico aseguró que “habrá que cambiar varias cosas y se hace cargo del momento crítico del equipo”.

El próximo partido de Boca será frente a Racing en la Bombonera el sábado 9 de agosto por la tercera fecha del Torneo Clausura. Es lo único que le queda de competencia y con el plantel que tiene no debería estar en la situación que está.

Para ese clásico faltan dos semanas y esa preparación seguramente será larga y convulsionada porque hay más dudas que certezas en qué pasará con el cuerpo técnico.

Sí Russo está en condiciones de dirigir a Boca o sí realmente se necesita un cambio urgente de entrenador. Es más, desde Buenos Aires manejan la información de que el Consejo del Fútbol preguntó las situaciones de dos técnicos como Gustavo Quinteros y Luis Zubeldía.