
La muerte de Leonardo Ariel Gallardo, ocurrida en la madrugada del martes en el barrio Juan Díaz de Solís, quedó esclarecida horas después tras una declaración clave ante la Policía. Héctor Orlando Alurralde, de 61 años, se presentó en la Comisaría 11 y explicó que el joven fallecido lo había abordado con intenciones de robo, junto a otra persona, cuando se dirigía a cumplir funciones como sereno en la empresa Cerámica Santiago.
Según su testimonio, ambos sujetos intentaron sustraerle la bicicleta y elementos personales. En ese contexto se habría producido un forcejeo con armas blancas, en el que Gallardo resultó herido. Fuentes policiales indicaron que el joven logró desplazarse hasta otro punto del barrio, donde su madre lo encontró sin signos vitales en el interior de su vivienda, ubicada sobre avenida Solís casi Lugones.
La División Homicidios y Delitos Complejos, que ya se encontraba abocada al caso, confirmó que la víctima tenía antecedentes por delitos contra la propiedad y 14 causas penales registradas.
El Ministerio Público Fiscal dispuso la aprehensión del sereno y el secuestro de las prendas de vestir y armas presuntamente utilizadas. La causa fue caratulada como homicidio en ocasión de robo.