Jueves primaveral en Santiago del Estero con 27 grados de máxima

Tras un amanecer cálido con 19.4°C vientos del sector sur y cielo algo nublado, Santiago del Estero tendrá un jueves primaveral; el Servicio Meteorológico Nacional anuncia que para hoy la máxima llegará a los 27 grados.

Para mañana viernes, habrá un ascenso en la máxima a 29 grados, mientras que la mínima rondará los 10°C. Volverán los vientos por la tarde aunque no de manera intensa.

El fin de semana será agradable, se mantendrán las temperaturas y no hay probabilidad de precipitaciones y tormentas fuertes. El SMN destaca que por lo menos hasta el lunes las jornadas templadas se mantendrán en la provincia.

Qué se espera para la llegada de la primavera el país

Durante la transición entre agosto y septiembre, la porción central del territorio nacional estuvo afectada por un intenso temporal coincidente con la tradicional tormenta de Santa Rosa. Este evento dejó lluvias y tormentas significativas, marcando un inicio agitado para el mes.

Sin embargo, la primera parte de septiembre se caracterizó por un período de mayor estabilidad. Predominaron jornadas con cielos despejados, viento persistente del sector norte y temperaturas en ascenso, más acordes a la estación primaveral. Esta situación favoreció un alivio momentáneo tras los episodios de precipitación registrados en las semanas previas.

Ahora, los análisis comienzan a mostrar señales de un cambio importante. A medida que se acerca la tercera semana del mes, se perfila un escenario con mayor aporte de humedad y la posibilidad de precipitaciones de variada intensidad sobre una amplia región del país.

Señales de inestabilidad hacia la tercera semana de septiembre

Entre el 21 y el 25 de septiembre, el patrón atmosférico podría experimentar una transición significativa. La persistencia del viento del norte seguirá aportando humedad a las capas bajas de la atmósfera, creando un ambiente más propicio para el desarrollo de inestabilidad.

En este contexto, el avance de un sistema frontal frío actuaría como detonante, favoreciendo la formación de chaparrones y tormentas. La zona más comprometida se ubicaría en el centro y Litoral de Argentina, donde las condiciones podrían tornarse más activas en ese período.

Aunque todavía falta para llegar a esas fechas, la tendencia merece atención. La combinación de humedad elevada y el ingreso de aire frío es un clásico motor de precipitaciones intensas, razón por la cual se comienza a vigilar esta evolución de manera anticipada.