Un grave hecho de violencia conmocionó al deporte pinamarense durante un partido de futsal local. El encuentro entre Crucero y La Reco terminó de la peor manera cuando un jugador del equipo visitante agredió brutalmente al árbitro luego de ser expulsado por mala conducta.
El incidente ocurrió cuando Crucero se imponía 5-1, y el referí decidió mostrarle la roja a un futbolista de La Reco tras gestos despectivos. Sin embargo, el jugador reaccionó de forma violenta: le dio una trompada al árbitro Cristian Escobar, quien quedó conmocionado y mareado. El agresor incluso intentó volver a golpearlo, pero fue contenido por sus compañeros y rivales.
Escobar fue asistido en el lugar y recibió atención médica, mientras que la escena, registrada en video, se viralizó rápidamente y generó un repudio generalizado entre los hinchas y la comunidad deportiva local.
Ante la gravedad de lo ocurrido, el Municipio de Pinamar actuó con firmeza y aplicó sanciones ejemplares. Según se informó oficialmente, el jugador Christian Hernández fue expulsado de por vida de todas las competencias deportivas organizadas por la Municipalidad, y su equipo, La Reco, fue descalificado del torneo actual de futsal.
El violento episodio volvió a encender las alarmas sobre la violencia en el deporte amateur y la necesidad de promover el respeto hacia los árbitros y las autoridades. Lo que debía ser una jornada recreativa terminó convertida en un hecho repudiable que deja una fuerte lección para las ligas locales.
