Lo que debía ser una noche de celebración para el básquet bandeño terminó empañado por un grave episodio de violencia. El domingo, Ciclista Olímpico venció a Tiro Federal en el estadio de Avenida San Martín y se clasificó a la final del Torneo Prefederal.
Sin embargo, una vez finalizado el encuentro, desde el exterior del estadio comenzaron a arrojar proyectiles hacia la cancha, donde aún permanecían jugadores, árbitros y un importante marco de público.
En medio de esos incidentes, el árbitro Nicolás Carrillo recibió un impacto en la cabeza que le provocó un corte y una abundante pérdida de sangre. El juez debió ser asistido de inmediato y trasladado en ambulancia al CISB, en un momento cargado de tensión y preocupación para todos los presentes.
Horas después, y luego de que circularan versiones que vinculaban al club local con la agresión, Tiro Federal difundió un comunicado oficial en el que se desliga de responsabilidad y afirma, basándose en investigaciones internas, que el proyectil que lesionó al árbitro fue lanzado desde fuera de las instalaciones deportivas por personas ajenas a la institución.
Según expresa el descargo, el hecho habría sido advertido por una vecina del club, quien puso en conocimiento a las autoridades competentes. Desde la entidad remarcaron que este testimonio contradice las acusaciones que buscaban responsabilizar a Tiro Federal por el incidente.

Asimismo, la institución felicitó a su parcialidad por mantener un comportamiento respetuoso y acorde a los valores deportivos durante todo el encuentro, pese —según denunciaron— a haber sido blanco de burlas, insultos y gestos inapropiados dirigidos principalmente a mujeres y niños, hechos que aseguran tener documentados.
El episodio permanece bajo análisis mientras se espera la continuidad de las actuaciones oficiales relacionadas con la agresión al árbitro Carrillo. El club, por su parte, reiteró su voluntad de colaborar con las investigaciones para esclarecer lo ocurrido.
