Las empresas de medicina prepaga en Argentina comenzaron a notificar a sus afiliados sobre los incrementos que se aplicarán a las cuotas de noviembre, que oscilarán entre el 3,9% y el 6,9%, dependiendo de la compañía y el plan contratado. Este es el quinto aumento del año, luego de que las prepagas obtuvieran libertad para ajustar sus tarifas a partir de julio, tras una disputa judicial.
Las firmas justificaron los incrementos, argumentando que son necesarios para garantizar la calidad de los servicios médicos y compensar los “importantes atrasos” en las cuotas. Con este ajuste, las tarifas se posicionan por encima de la inflación de septiembre, que fue del 3,5%.
Aumenta también el plus
Además de las cuotas, en algunos casos los aumentos también aplicarán a los copagos, lo que incrementará aún más los costos para los usuarios. La Superintendencia de Servicios de Salud (SSS) extendió el plazo para que las prepagas apliquen incrementos de manera diferenciada según el plan y la región, postergando la medida hasta el 1 de diciembre.
A partir de diciembre, las empresas deberán proporcionar a sus afiliados un desglose detallado de los conceptos que conforman el valor mensual de los planes, incluyendo el costo base, los ajustes por edad o riesgo, impuestos y otros gastos adicionales.
Este ajuste plantea una nueva carga para los usuarios de medicina privada, en un contexto económico donde la inflación y las políticas de ajuste continúan presionando el poder adquisitivo de los argentinos.
