El presidente Javier Milei buscó bajar el tono en la polémica con las universidades nacionales luego de sus dichos del sábado pasado, cuando planteó que hoy sólo pueden concurrir a las facultades públicas los hijos de las familias ricas. Esos dichos fueron interpretados como un primer paso para discutir el arancelamiento.
Este martes, el jefe de Estado aclaró: “La universidad va a seguir siendo pública y no arancelada, eso no se toca”.
En diálogo con el periodista Antonio Laje en LN+, el mandatario desarrolló: “Acá no está en discusión la universidad pública y no está en discusión el tema de que es no arancelada, porque gratuita no es, alguien la está pagando, en este caso la paga mayormente los que no van”.
Lo que sí está en discusión -dijo Milei- es la intención del gobierno nacional de auditar los fondos que reciben las universidades públicas. “Todos los que hacen este revuelo… ¿acaso están a favor de que se utilicen las universidades políticamente para robar en beneficio de delincuentes de la política?¿Ustedes están a favor del robo? Como esto está siendo pagado por todos los argentinos, creo que corresponde que esos fondos tengan que ser auditados”, agregó.
Al ser consultado sobre su decisión de vetar la ley que había aprobado el Congreso para regular el salario de los docentes, el mandatario reiteró que el problema que tenía la norma es que no justificaba de dónde se iban a tomar los fondos. No obstante, se mostró abierto a que la oposición impulse una nueva ley que especifique el origen del financiamiento.
“Los docentes no están bien pagos, es algo histórico. Los tipos que no lo arreglaron me vienen a pedir que arregle algo que pasa hace 40 años y yo estoy dispuesto a arreglarlo, lo que estoy diciendo es que me digan cómo lo hacemos”, introdujo
Y completó: “Acá está el Presupuesto, díganme cómo lo vamos a arreglar: yo pago los intereses de la deuda, con el resto hagan lo que quieran, pero no voy a subir los impuestos ni tomar deuda nueva”.
En otro tramo del reportaje, el Presidente volvió a insistir sobre la posibilidad de auditar el presupuesto universitario: “El que no quiere ser auditado es un chorro. ¿Por qué no quieren ser auditados? Porque la política utiliza las universidades para financiarse, para financiar la mugre de la política”. También sugirió que habría que analizar “qué hacen los profesores en las aulas”.