El Gobierno argentino presentó un nuevo proyecto de ley que busca agilizar el proceso de divorcio, permitiendo la disolución del matrimonio de mutuo acuerdo sin necesidad de intervención judicial. La propuesta, enviada este lunes al Congreso, busca implementar un trámite administrativo más simple, rápido y económico para poner fin a un matrimonio.
El documento, firmado por el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, destaca que esta modalidad ya se aplica en países como Brasil, Portugal, Colombia, México y Japón. Según el proyecto, el divorcio se podrá realizar ante el Registro de Estado Civil, con el objetivo de ahorrar tiempo y dinero a las parejas.
Este nuevo sistema también aliviaría la carga sobre el sistema judicial, reduciendo los costos y la lentitud de los tribunales, al permitir que los procesos de mutuo acuerdo se resuelvan por vía administrativa. Además, otorgaría mayor libertad a las personas para finalizar su vínculo matrimonial y emprender nuevos proyectos de vida.
El proyecto de ley forma parte del plan de modernización judicial del Gobierno, que también incluye la Ley Hojarasca, destinada a eliminar leyes obsoletas.