
La ropa china cada vez toma mayor fuerza en las ventas en Argentina. Su estrategia de redes, hace que cualquiera que alguna vez haya osado mirar un solo producto de Shein, comienza a recibir un bombardeo en redes y mail nunca visto. Y si algo faltara, todo el mundo habla de la marca china que vende todo muy barato. Primero fue el furor por las prendas, ahora crece la pasión por comprar fardos de ropa Shein.
Mientras la industria textil se desespera por poder vender para sobrevivir, marcas como Shein y Temu venden cada vez más.
Según el informe de BaeNegocios, un dato alarma: en los primeros 5 meses del 2025 aumentó un 150% interanual la importación de prendas terminadas, no están medidas las compras al exterior de los usuarios. Algo que repercute en la industria, por eso desde que asumió Javier Milei y se cambiaron las políticas industriales se perdieron 10.000 puestos de trabajo en la industria textil.
Luciano Galfione, presidente de la Fundación ProTejer, señaló: “Es muy difícil competir con la industria china que entra, no paga impuestos, no cobra el envío, no tiene controles de fabricación, ni cumple leyes laborales o ambientales. Es una sangría de dólares constantes para el país. Nosotros pagamos impuestos nacionales, provinciales, municipales, cumplimos leyes laborales y ambientales. Como Estados Unidos puso medidas muy restrictivas al comercio, aprovechan y subvencionan la venta en Argentina, total se liberó todo tipo de control”.
Shein produce entre 6.000 a 10.000 artículos por día y lanza un promedio de más de 300.000 colecciones al año.
Las prendas son fabricadas por operarios que trabajan de 8 a 22 horas todos los días con un descanso de sólo un día al mes, según denunció la ONG suiza Public Eye. Además, es considerada por varias ONG como una de las empresas que más contamina.
Compras de fardos
Como si algo faltara se puso de moda la compra de fardos de ropa de Shein que vienen con 50 o 100 prendas directo de China. Cada una con su bolsita de Shein. Basta con mirar Tik Tok para acceder a toda clase de revendedores que ofrece fardos con 50 prendas chinas a $400.000 a razón de $8.000 cada una. Se desconoce lo que llega, los talles, colores, sólo se sabe que son prendas marcas Shein.
Hasta el principal sitio de compra y venta online de Argentina ofrece la posibilidad de acceder a la compra de fardos de 25 sets incluyen camisolín y conjuntos de ropa interior de encaje marca Shein por $280.000 y se puede pagar en 6 cuotas de $64.079 y el monto final se eleva a $384.474.
Domingo frío, pero soleado, Joselyn no tiene más de 30 años, está en la parque gigante que ocupa casi una manzana entre avenida Directorio y Lisandro de la Torre en el barrio de Mataderos, a pasos de la feria. Un lugar repleto de manteros que venden ropa usada, nueva, bazar, carteras, almohadones, sábanas, cubrecamas, de todo.
Junto a sus primas tiro en el césped un montón de bolsas con ropa de Shein. Y como por arte de magia, las mujeres se amontonan para abrir, una por una las bolsas y descubrir qué hay adentro. Si vale o no la pena comprar. Hay de todo remeras, ropa interior, buzos, ropa de chicos, pantalones. “Vendo toda la lencería a $10.000, las bikinis a $12.000 y los jeans a $18.000. El resto a $15.000 que son calzas, pijamas, buzos, joggings y carteras. El fardo de 100 prendas me costó $800.000, los fue a comprar mi mamá a Aguas Blancas, en Orán, Salta. Con esto nos rebuscamos para poder ganar algo”, cuenta mientras con un amigo controla las ventas.
A pocos pasos está su prima, ella tiró una manta y vende de todo. Carteras de Shein a $12.000 y $15.000 y pantalones calzas de la misma marca a $18.000, pero si alguien le pide rebaja, enseguida lo baja a $15.000. Las prendas son de todos los talles. Mientras en Argentina es complicado encontrar ropa de mujer de talles grandes, en Shein hay 2XL, 3XL, todo se consigue sin drama.
Si se los busca en la frontera, se paga $8.000 por prenda y se saca desde un 20% hasta casi un 100% depende las prendas. Pero hay que tener suerte con lo que llega, no se puede pedir talles, ni colores, ni prendas.