
“Decepcionado” por Elon Musk, Donald Trump tomó distancia y la amistad que se veía inquebrantable al principio de su gestión, se disolvió entre declaraciones mediáticas y tuits. El conflicto arrancó por las críticas del director de Tesla a un proyecto de ley del presidente para recortar impuestos y gastos. Y ahora, ¿de qué lado de la grieta quedará el presidente Javier Milei, “amigo” de ambos?
Este jueves, el mandatario estadounidense fue contundente en el despacho Oval: “Elon y yo teníamos una relación excelente. No sé si la seguiremos teniendo”. “Dijo cosas muy bonitas sobre mí, y no ha dicho nada malo de mí personalmente, pero estoy seguro de que eso será lo próximo. Pero estoy muy decepcionado de Elon. Le he ayudado mucho”, agregó.
Para el Trump, las quejas brotaron porque el proyecto de ley propone eliminar los créditos fiscales al consumo para vehículos eléctricos. Musk, director ejecutivo del fabricante de vehículos eléctricos Tesla, declaró su oposición a la normativa, dado que incrementará el déficit federal.
Lejos quedaron los elogios del jefe de Estado cuando Musk renunció a su puesto de supervisión de la campaña de reducción de costos de la burocracia federal. Se supo que estaba molesto porque extrañaba trabajar para Trump.
Al respecto, el mandatario estadounidense, sostuvo que “no es el primero”. “Hay gente que deja mi administración… y luego, en algún momento, la extrañan muchísimo, y algunos la aceptan y otros, incluso, se vuelven hostiles”, comentó.
Mientras Trump hablaba, Musk escribió en X: “Slim Beautiful Bill para la victoria”, una referencia al título oficial del proyecto de ley, “Big Beautiful Bill Act”.
En otra publicación, Musk dijo que estaba de acuerdo con los recortes a los créditos para vehículos eléctricos siempre y cuando los republicanos eliminaran del proyecto lo que él llamó una “montaña de gastos repugnantes” en gastos innecesarios.
Del dicho al hecho…
Musk llegó al gobierno con planes osados de recortar 2 billones de dólares del presupuesto federal. Se marchó la semana pasada con un logro mucho menor, tras recortar aproximadamente la mitad del 1% del gasto total.
El empresario fue un poderoso aliado de Trump: gastó casi 300 millones de dólares para apoyar a los republicanos en las elecciones de 2024 y luego supervisó el Departamento de Eficiencia Gubernamental de Trump.
Su acción, que eliminó miles de empleos federales y recortó miles de millones de dólares en ayuda exterior y otros programas, causó trastornos en las agencias federales y provocó protestas generalizadas en los puntos de venta de Tesla en Estados Unidos y Europa.
Las acciones de Tesla ampliaron sus pérdidas tras las críticas de Trump a Musk: la acción había bajado casi un 6%; antes del discurso de Trump, había caído un 3%.
In light of the President’s statement about cancellation of my government contracts, @SpaceX will begin decommissioning its Dragon spacecraft immediately pic.twitter.com/NG9sijjkgW
— Elon Musk (@elonmusk) June 5, 2025