Vienen por todo: el Gobierno le anticipó al Congreso los próximos pasos para privatizar las empresas del Estado

El Ejecutivo explicó los mecanismos que usará para que las compañías públicas pasen a manos del sector privado. Cuáles son las firmas en la mira y qué puede pasar con los trabajadores.

El proceso para pasar las empresas que funcionan bajo el paraguas del Estado al sector privado se mueve en distintas direcciones, pero avanza. Ahora, el Gobierno a través del informe que la jefatura de Gabinete envió al Congreso algunas pistas más sobre el plan oficial para esas compañías.

Actualmente, la Agencia de Transformación de Empresas Públicas tiene dentro de su órbita 59 empresas que funcionan en 11 jurisdicciones de la administración estatal. A su vez, hay otras 19 sociedades que son consideradas subsidiarias.

Pero para concretar las privatizaciones, hay distintos mecanismos que el Ejecutivo tiene en mente: uno es abrir licitaciones y avanzar en la venta, para lo que necesita de la aprobación del Congreso, o podría lanzar una oferta pública inicial para sacar las acciones de las compañías al mercado de capitales bajo un método denominado initial public offering (IPO, por sus siglas en inglés). También podría ceder parte de las empresas -por ejemplo a los empleados- o cerrarlas y poner a la venta los terrenos a través de la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE).

Dentro de las firmas que quedaron habilitadas por el Poder Legislativo en la Ley Bases para continuar en el camino hacia la privatización están Agua y Saneamientos Argentinos (AYSA), Energía Argentina, Intercargo, Corredores Viales, Belgrano Cargas y SOFSE (Ferrocarriles). Yacimientos Carboníferos Río Turbio (YCRT) y Nucleoeléctrica Argentina Sociedad Anónima (NASA) figuran en artículos aparte que expresan que se entregarán una serie de acciones, pero el Estado nacional debe mantener la participación mayoritaria.

En el informe de Jefatura de Gabinete, Economía explicó que esa lista de empresas está bajo análisis y que pueden ser “privatizadas, concesionadas, transformadas, cedidas o cerradas”. El procedimiento a adoptar será definido por la Agencia de Transformación de Empresas Públicas (ATEP).

Además, el Ejecutivo dio precisiones sobre la evolución del proceso privatizador durante los primeros meses de gestión. “El 23 de octubre se inició la privatización de Trenes Argentinos Cargas, también conocida como Belgrano Cargas y Logística S.A. También se avanzó en la privatización de cuatro centrales eléctricas y se anunció un llamado a un concurso público nacional e internacional para la venta del paquete accionario mayoritario de Alicurá Hidroeléctrica Argentina S.A., Chocón Hidroeléctrica Argentina S.A, Cerros Colorados Hidroeléctrica Argentina S.A. y Piedra del Águila Hidroeléctrica Argentina S.A”, precisó el documento.

En este sentido, Economía explicó cuáles son las opciones que actualmente se barajan y detalló que hay cuatro empresas sobre las que se puede realizar el mecanismo de IPO: TANDANOR, AySA, ARSAT y NASA. A su vez, otra alternativa es definir la privatización en forma total, algo que podría suceder en TANDANOR, INTERCARGO, AySA, Banco Hipotecario, ENARSA, IMPSA y TRANSPELT. En tanto, el Banco Nación, NASA y YCRT podrían quedar privatizadas parcialmente.